no decimos nada.
Sólo un resoplido
alguna que otra vez
de tu boca llena,
incansable, abierta,
pegajosa, viva,
pequeñita, fuerte.
No decimos nada
callados los dos
mirada con mirada
tu alma y mi alma.
mágico y etéreo
nos tiene suspendidos
entre cielo y tierra.
Y me miras tanto
que otra vez adentro
aunque estés fuera
mi vientre se mueve
en contracciones blancas.
No decimos nada
pero es tal la mirada
que me tienes presa
dulcemente atada.
Y volamos juntos
por planetas raros,
entre perfume de alas,
en una gota de agua,
entre colores mansos,
en cantos de arpegios,
en tus burbujas blancas.
Y es todo tan nuevo,
tan nuevo y tan viejo
que ambos aprendemos
solos
embobados
mudos
extasiados.
Yo te conecto con el mundo.
Tú, al más allá me amarras.
Así...en silencio
mirada con mirada.
Autora:
Evelina C. Caneva
Para el libro Lactancia Materna, una mirada a la vida...
Editorial San Pablo Argentina
No hay comentarios:
Publicar un comentario